El terror está en el aire. Monstruos que pueden ser hombres con los cuales convivimos diariamente. O entes incomprensibles para nuestra lógica humana que nos acechan en la oscuridad. El terror producido por el humano lo tenemos en Higurashi no Naku Koro ni, y el sobrenatural lo tenemos en Yami shibai y Kowabon, los cuales agudizarán nuestros sentidos al máximo para prevenir que alguien o algo nos arrastre al vacío.
Higurashi no Naku Koro ("Cuando las cigarras lloran") es un anime y manga basado en el videojuego de novela visual de terror del mismo nombre. Este tipo de novelas el protagonista debe llegar a una meta en específico, de acuerdo a las respuestas o actos a seguir que se escojan entre varias opciones, resultando en distintos finales.
Con esa idea, Higurashi nos adentra en el pueblo Hinamizawa, muy escondido entre las montañas, en que el citadino Keiichi llega con su familia en busca de un cambio de aires. Keiichi se hace muy amigo de un grupo de chicas muy alegres, y pareciera que disfrutará su vida allí, hasta que él escucha el nombre de Watanagashi y pregunta a sus amigas sobre ello, a lo que ellas le dicen que es un festival anual del pueblo para venerar a su dios, Oyashiro-sama. Sin embargo, cuando Keiichi intenta saber más al respecto, ellas le evaden el tema. Él investiga el secreto que nadie en el pueblo le quiere decir: todos los años en que se festeja el Watanagashi una persona muere y otra desaparece.
Poco a poco se dan pistas sobre quién o qué anda detrás de esas muertes, así como la historia sangrienta del pueblo y sus tres familias líderes, y cómo la apariencia externa de sus protagonistas femeninas sólo es una fachada.
Lo que vuelve interesante esta serie es el constante estado de incertidumbre, tensión y hasta paranoia que produce cada capítulo ante nuevos misterios y respuestas inesperadas, en que vemos los puntos de vista de cada personaje para entender el por qué actuaron sangrientamente. Una muy buena serie de terror psicológico y gore para ver de noche.
Si esto no les produce nada en especial, seguro los otros dos anime sí. Yami shibai hace referencia al kami shibai, el cual era un teatro de figuras de papel empleado por los monjes budistas, mediante el cual contaban una historia, y a yami, que significa oscuridad. Al inicio de cada capítulo vemos a un cuenta cuentos misterioso que usa una máscara y llama a los niños del parque para que escuchen y vean su teatro de terror. En los tres-cinco minutos que duran los capítulos, vemos a diferentes personas que se ven acechadas por leyendas urbanas y el folklore japonés, y entre angustia y terror, sucumben ante entes que sólo buscan alimentarse de otros.
Su estilo de animación hace recordar, justamente, ese tipo de teatro con figuras de papel que van cambiando. Las historias que presenta en sus tres temporadas son bastante inquietantes, y puede causarles pesadillas o que se volteen esperando no encontrarse nada anormal atrás de ustedes.
El último anime de hoy, igual de corta duración, es Kowabon. Si bien Yami shibai se va por el lado del folklore y la creación de rumores, Kowabon explora otro aspecto que es muy común a todos hoy en día: la tecnología y redes sociales. ¿Qué pasaría si hubiera algo que te observa mientras usas tu celular o computadora? ¿O si las cámaras de seguridad, en vez de cuidarte, te vigilan para esperar el momento adecuado para atacarte? En cada capítulo vemos situaciones diferentes de índole sobrenatural, vistos a través de algún aparato electrónico en que vemos el fantasma y la persona a la que está atacando. Quizá sea una manera algo terrorífica de hacernos pensar sobre la dependencia actual que tenemos de la tecnología.
Sintamos algo de miedo antes de que no podamos sentir nada más después del último grito.
Les dejo el opening de Higurashi:
No hay comentarios.:
Publicar un comentario